Oaxaca.-La Cámara de Diputados aprobó con 458 votos a favor la reforma de Ley General de Salud, con el objetivo de establecer el etiquetado frontal de advertencias en alimentos y bebidas industrializados que sobrepasen los parámetros señalados por la Secretaría de Salud, en lo que se refiere a grasas saturadas, azúcares, calorías, etc.

De este modo, la institución recibió las facultades para que ordene a las empresas adicionar el etiquetado o colocación de advertencias en los envases de sus productos. Ahora, la normativa pasará al Senado de la República, que discutirá el tema y los posibles efectos constitucionales.

Los argumentos a favor de la aprobación de la ley se basaron en las cifras de sobrepeso y obesidad que se registran en México. Actualmente, el 34 % de los niños de 5 a 11 años y el 35 % de adolescentes (12-19 años) padecen una de estas enfermedades. 

Nuestro país ocupa el segundo lugar en índices de sobrepeso en todo el mundo y ya ha superado a Estados Unidos en cuanto a obesidad infantil.

Asimismo, en México siete de cada 10 adultos (71.2 %) tiene sobrepeso, en tanto que un 9.4 % de la población sufre diabetes. En total, 9.4 millones de personas padecen dicha enfermedad. 

Representantes de la Comisión de Salud han aplaudido la decisión de la Cámara y han sostenido que se trata de un primer paso para advertir y concienciar a los consumidores acerca de lo que están comprando.

De acuerdo con la especialista de REVIEWBOX, Alejandra Flores, la situación en México ha empeorado en los últimos tiempos y las políticas han resultado insuficientes. 

“Los casos de sobrepeso y obesidad han aumentado de forma alarmante en los últimos años. México encabeza el consumo de bebidas azucaradas y refrescos en todo el mundo, lo cual es solo una prueba de la mala alimentación en general. Si a ello le sumamos la poca o nula actividad física y vida sedentaria, tenemos un panorama poco alentador”, subraya la experta.

Entre los más críticos de la medida está el Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo (ConMéxico), que ha señalado que la propuesta de los etiquetados no se ha aplicado en ninguna parte. 

No obstante, la Alianza por la Salud Alimentaria ha destacado que hay varios países en Latinoamérica que encabezan la lucha contra el consumo de comida chatarra. Chile, Perú y Ecuador son los principales abanderados. Además, Uruguay está muy próximo a sumarse a la política de etiquetados en los productos.

Las voces a favor de la normativa sostienen que el ciudadano tiene el derecho de conocer la información de forma precisa y rápida. De esta forma, ayudará a las personas a tomar decisiones en cuestión de segundos. Un consumidor tarda entre 4 y 13 segundos en ver un producto, por lo cual una etiqueta se antoja indispensable para catalogar la calidad de un producto.