Por:Salvador Hernández.

 

Oaxaca.-El viejo fascismo ha vuelto, con rostro nuevo. Acometiendo a los más vulnerables. Arguyendo, antes del zarpazo, la “protección física, laboral y económica de los ciudadanos estadounidenses”.

 

Escondiendo su racismo, el gobierno de Donald Trump pretende crear “ghettos” gigantescos, con la “modalidad” de países periféricos, emergentes, o del tercer mundo. Al igual que en la era hitleriana, los países dominados, hacen el “trabajo sucio”.

 

Separando a miles de familias; encerrando a “ilegales” en jaulas, sin derecho a bañarse ni cepillarse los dientes, (“La Jornada” 14 /7/2019 (*) Con la agravante de expulsar a personas por el simple hecho de obtener un empleo y una vida digna. Las víctimas latinas – cerca de once millones-, son principalmente ¡mexicanas! Por ahora, no existe la pretensión de invadir una nación, o exterminar una raza en forma directa.

 

La gente se desborda a protestar por las calles de Chicago-tierra de mártires y luchadores sociales-, contra una “remasterización” fascista, en plena época neoliberal. Pero no será –seguramente-, la primera ciudad en que miles de personas salgan a las calles.

La voz de las mayorías, ante la desigualdad; ante los gobiernos corruptos, rebasarán las fronteras. Y los monumentos de la ignominia se erigirán, como los “nuevos Auswitch y Treblinka”. En una declaración, por demás ominosa el “Jefe de los guerrilleros” de la “Casa Blanca” (*), ha dicho que “como un acto de misericordia. Nueva Orleans será perdonada” (*), quizá porque se acerca el huracán “Barry”, y que al igual que con “Katrina” los sectores más vulnerables, cerca de dos mil, en su mayoría negros, pagaron con sus vidas, la omisión y negligencia del gobierno de George W. Bus. El invasor de Irak. 

Posteriormente, el mismo Bush en sus memorias señaló: “Sobre el huracán ´Katrina´, el problema es que no fuera que tomara malas decisiones. Fue que me tomé mucho tiempo para decidir”. 

Así se “cuecen las habas” con el nuevo fascismo neoliberal.
(*) “La Jornada”, misma fecha.