Oaxaca.-Ante el riesgo de violaciones a los derechos humanos en materia de salud de pueblos indígenas y afromexicano de la entidad, derivados de la contingencia por COVID-19, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) emitió una “Alerta temprana”.
El órgano autónomo advirtió la alta vulnerabilidad de estos sectores históricamente marginados, por lo que requirió acciones inmediatas a los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), la Secretaría de Pueblos Indígenas y Afromexicano (Sepia) y a la Coordinación para la Atención de los Derechos Humanos del Poder Ejecutivo (CADH).
A los SSO pidió prepararse con medicamentos, material y recursos humanos en unidades hospitalarias y centros de salud que atienden a población indígena y afromexicana, para brindar atención oportuna o remitir los casos de COVID-19 que reciban.
Esto aunado a que las intervenciones de prevención y detección que lleve a cabo las diferentes instancias del Sector Salud relativas a la pandemia COVID-19 en los pueblos indígenas y afromexicano, se realicen con enfoque intercultural, perspectiva de género y respeto a los derechos humanos.
A esta instancia y a la Sepia llamó a considerar la diversidad cultural y lingüística de la entidad, a fin de facilitar el acceso efectivo a la información de las medidas preventivas, protocolos y acciones que debe tomar en cuenta la población para hacer frente a la pandemia.
De tal forma que, en caodyuvancia institucional, instruyan a quien corresponda para que se adopten medidas administrativas para la elaboración y difusión de folletos, trípticos y cualquier otro material informativo relativo a la enfermedad por coronavirus (COVID-19), los cuales deberán traducirse en lenguas indígenas del estado de Oaxaca.
Así también, la Defensoría solicitó a la Secretaría de Pueblos Indígenas y Afromexicano que en el ámbito de su competencia se garantice el diálogo intercultural entre los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas y el estado, para lo cual se deberá impulsar su participación en la definición, planeación, ejecución y evaluación de cualquier actividad que afecte su derecho humano a la salud en codyuvancia con la Secretaría de Salud.
A dicha institución requirió que en la organización y realización de eventos y actos masivos públicos o privados en las comunidades indígenas y afromexicanas, se coordinen con ellas y se tome en cuenta su opinión.
Mientras que a la Coordinación para la Atención de los Derechos Humanos del Poder Ejecutivo (CADH), pidió que implemente las acciones pertinentes para la atención integral de la Alerta Temprana, en conjunción con las autoridades sanitarias y administrativas correspondientes.
La Defensoría de los Derechos Humanos advirtió que “el derecho a la salud de los pueblos indígenas y afromexicano está en riesgo en tiempos ‘normales’, por lo que su vulnerabilidad se agrava en las situaciones como la que actualmente representa el COVID-19”.
Y señala que el acceso a los servicios de salud puede dificultarse durante una contingencia como la actual, pues el aumento de la demanda y la debilidad en la infraestructura sanitaria hacen que las personas pertenecientes a este sector poblacional estén en doble riesgo.
El órgano autónomo reconoce que la constante movilidad de las personas indígenas y afromexicanas ante la necesidad económica, laboral y de acceso a los servicios, así como la afluencia constante de turismo como la actividad económica más fuerte, son factores que aumentan el riesgo de contagio de coronavirus o COVID-19.
La vulnerabilidad identificada llevó a la institución a emitir la Alerta Temprana, con el fin de garantizar a esta población su derecho a la salud y evitar violaciones a los derechos humanos de imposible reparación.