Oaxaca.-La voz de Zoyla Bengochea, mamá de Dafne víctima de feminicidio, es firme al asegurar “no voy a ceder, no me van a doblar”. Y es que, a dos años de la sentencia al asesino de su hija, Alejandro R. L. que constituye la primera por feminicidio en Oaxaca, la defensa del acusado busca con un amparo, una disminución a los 78 años de cárcel.

Por sorteo de ley -añadió la madre de Dafne- enviaron el caso a Saltillo, Coahuila, hecho que para ella representa una injusticia porque dificulta el seguimiento al caso ante la falta de solvencia económica para su traslado constante.

“Yo no tengo una solvencia económica buena, lo que pienso es que lo hicieron como una estrategia para que yo no pueda moverme, pero se equivocaron porque a donde esté, a donde hayan mandado el expediente de mi hija, iré, así tenga que pedir limosna, voy a llegar hasta donde tenga que llegar”, advirtió.

Fue el 9 de abril de 2013 cuando Dafne de 21 años de edad fue apuñalada por Alejandro R. L. por haber terminado su relación de noviazgo y negarse a regresar con él. Tras una larga lucha de cuatro años, en octubre de 2017 finalmente fue sentenciado a 78 años de prisión y una multa de 73 mil 656 pesos por el delito de feminicidio agravado.

El caso de Dafne fue el primero abierto a proceso judicial por el delito de feminicidio en el estado Oaxaca, ello, después de que el 22 de octubre de 2012 entrara en vigor el tipo penal de feminicidio para la entidad.

Sin embargo, recientemente la familia de Dafne se enteró de que Alejandro Rivera interpuso un amparo, pues de acuerdo con las leyes las personas sentenciadas tienen hasta 8 años para solicitarlo, en contraparte las víctimas sólo 15 días para hacerlo.

“El asesino de mi hija tuvo 8 años para solicitar el amparo mientras que las madres víctimas de feminicidio sólo 15 días, a mí se me hace cruel, doloroso, me da mucha impotencia porque no se vale que las leyes no sean parejas, hacen más por los asesinos, tienen más derechos, privilegios que nosotras”, manifestó.

Pese a este contexto -agregó- no permitirá que sea restado un sólo año de la sentencia a la que fue condenado por el asesinato de su hija.

“Alejandro mató a mi hija de una manera cruel, despiadada, sin misericordia, le cortó sus ilusiones, las alas a mi hija, sus ganas de triunfar. Me privó y privó a Dafne de estar juntas, de seguirnos abrazando, queriéndonos, amándonos. Yo le hice una promesa en su ataúd, esa promesa hasta al final se la voy a cumplir porque esto no termina. Voy a seguir tocando puertas”, manifestó.