Oaxaca.-En el marco del Día Mundial de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca pugna por hacer efectivo el reconocimiento constitucional del acceso a internet como un derecho humano en el país y en la entidad.
La pandemia por Covid-19 y el consecuente confinamiento social, hizo notable la brecha digital que existe en el territorio oaxaqueño, puesto que solo un mínimo porcentaje de las y los estudiantes, así como de la fuerza laboral de distintos ámbitos hacen uso del internet como medio para ejercer el derecho a la educación y al trabajo.
Ante ello, la DDHPO advirtió que es una realidad que niñas, niños y adolescentes de zonas rurales e incluso urbanas en condiciones de pobreza, carecen de acceso a internet, lo que les impide continuar con su educación a distancia.
En este contexto, el organismo defensor de los Derechos Humanos señaló que no obstante que el acceso a internet y banda ancha fue reconocido como un derecho humano por el Estado Mexicano desde el año 2013, la realidad es que aún existen grandes zonas del país y de nuestra entidad en el que es prácticamente inexistente.
De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de Información en los Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) correspondiente a 2018, el 29.5 por ciento de los hogares en Oaxaca tuvieron servicio de internet (355 mil familias), lo que coloca a la entidad como el tercer lugar con menor índice de acceso, únicamente antecedido por Guerrero y Chiapas.
Por lo anterior, la DDHPO hace un llamado a las autoridades federales, estatales y municipales, así como a los Poderes Ejecutivo y Legislativo para que intervengan y realicen las acciones necesarias que permitan garantizar que todas las niñas, niños y adolescentes puedan acceder a los servicios educativos en línea, especialmente en las zonas rurales y marginadas de las ciudades.
La institución autónoma detalló que la accesibilidad a internet debe entenderse en dos dimensiones: la primera, en un sentido de acceso a los contenidos en línea sin restricciones y en el cual el internet es una herramienta que favorece el crecimiento y el progreso de la sociedad en su conjunto, además tiene la capacidad de promover la democracia, pues alienta la libertad de expresión y opinión.
En tanto que la segunda implica generar infraestructura física y material que permita a las personas acceder a internet especialmente en el caso de niñas, niños y adolescentes como una de las formas para poder continuar con su proceso educativo.
La pandemia por Covid-19 conlleva un replanteamiento de la realidad hasta ahora conocida, en el que es de suma importancia generar rápidas y efectivas respuestas a los nuevos desafíos que el mundo enfrenta, y en el que el internet se ha convertido en una de las herramientas más importantes para ello, sostuvo la DDHPO.
De tal forma que garantizar el acceso a internet para todas las personas, pero especialmente a niñas, niños y adolescentes, permite acceder a una serie de vastas herramientas para su educación, además aporta oportunidades de hacer que la formación de la infancia pueda ser más asequible e inclusiva; esto aunado a la reconstrucción de los espacios laborales y la cadena productiva.