Escrito por Sonia Gerth / Cimacnoticias
Oaxaca.- Las familiares de personas desaparecidas reunidas en un plantón en el Zócalo frente al Palacio Nacional, celebraron el comunicado del Senado de la República que confirma la renuncia de la Comisionada Ejecutiva de Atención a Víctimas, Mara Gómez Perez, efectiva a partir del 23 de junio del presente año. La destitución de la funcionaria era una de las principales exigencias de las familiares, ya que se sienten maltratadas y revictimizadas por comentarios de la Comisionada.
La desconfianza era tal, que a pesar de que los rumores de la renuncia se hicieron públicos el pasado viernes 19 de junio, las madres y hermanas no quisieron creerlos hasta tener la renuncia escrita en sus manos. Ayer la tuvieron- la Senadora Mónica Fernández Balboa, presidenta de la mesa directiva del Senado, informó a la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero mediante el Oficio No. DGPL.-2P2A.-5357, que Gómez Pérez presentó su renuncia al cargo de Comisionada Ejecutiva de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.
Ahora celebran las alrededor de 90 familiares que llevan ya tres semanas en sus casas de campaña frente al Palacio Nacional. Tuvieron que vivir una fuerte tormenta el lunes, que inundó todas las carpas y mojó las pertenencias de las familias, y el sismo de 7.5 el martes, pero el campamento se ve fortalecido. Varias lonas fuertes cubren el ensamble, y fueron amarradas con clavos en el asfalto de la calle al frente del Palacio Nacional. En letras blancas grandes, se pintó “¿Dónde estan?”, y “¡Mara fuera” en el asfalto.
Las autoridades locales, contó Victoria Delgadillo Romero, del colectivo “Familiares Enlaces Jalapa”, fueron tan amables de cercar el plantón con botes y cinta amarilla. Las madres se sienten inseguras de noche, “porque somos casi sólo mujeres, sólo hay dos varones”, por eso la policía prometió hacer rondines. Todas las mañanas, vienen unos paramédicos para medir la presión y prestar atención a las familiares que lo requieren.
Sin embargo, hasta en los próximos días se va a tomar la decisión si las familias levantan el plantón o no. “Nosotros estamos pidiendo que lo dé a conocer Andrés Manuel López Obrador públicamente, en la mañanera, ya que no nos recibió, al menos que lo haga público, las decisiones y los compromisos que tiene con los familiares de los desaparecidos”, insistió Delgadillo Romero el martes.
Beatriz Torres Zuleta, cuyo hijo desapareció en 2016 en Jalisco, dijo que “las cosas se dan con o sin él (presidente), siempre cuando sí nos atiendan todos nuestros pliegos petitorios que hay.” Las dos principales exigencias de las familiares eran la destitución de Gómez Pérez y una reunión con el presidente.
En otro apartado, pero no como requisito para levantar el plantón, pidieron un mínimo de dos asesores jurídicos por colectivo, el apego a la Ley General de Víctimas, y no los criterios y lineamientos de la CEAV y sus funcionarios, realizar evaluaciones a los Centros de Atención Integral en los estados, resolver los trámites ante el Registro Nacional de Víctimas “cuyo rezago ha aumentado durante el tiempo que entró como titular Mara Gómez”, un informe de transparencia sobre el cumplimiento de resoluciones de judiciales, y un plan de acción de la Comisionada.
Preocupa que la CEAV se quede acéfala
Y aunque las familiares del plantón consideran la renuncia un triunfo, el futuro de la CEAV como institución queda otra vez incierto. El o la nueva titular de la institución debe luchar por el presupuesto, que Gómez Pérez, denunció, se recortó un 75 por ciento con el decreto de austeridad de López Obrador, del 23 de abril. Sin embargo, las Secretarias de Gobernación y Hacienda salieron después a desmentir y afirmar que el trabajo de Derechos Humanos no será afectado por el recorte.
Ahora, el puesto de Comisionada queda vacío. Norma Ledezma Ortega, del Consejo Consultivo de la CEAV, calificó el cambio “algo catastrófico” en el programa Análisis Feminista de Violeta Radio ayer. “No por la renuncia, sino en el ¿Qué sigue? ¿Otra terna? Luego sigue el proceso de publicación etc., y se termina el año sin titular. Desde la sociedad civil, es necesario no poner nombres en la mesa, sino perfiles para personas calificadas. Sin embargo, lo más importante seguiría siendo el apoyo desde arriba”, dijo, porque el presidente se habría mostrado insensible a las miles de víctimas en el país.
Victoria Delgadillo Romero opinó que se debería de respetar la terna anterior, que aparte de Gómez Pérez incluía a María de los Ángeles Haces Velasco, directora de enlace con la CEAV, y Melba Adriana Olvera Rodríguez, quien presidió la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Baja California hasta este año. “Nuestra petición es que se vuelva a tener la terna que se tenía anteriormente. Está bien que haya más gente que se postule, pero que respeten la terna, y la decisión de los colectivos”, dijo.
Mientras tanto, al clamor de los colectivos de búsqueda se sumaron madres y familiares de víctimas de feminicidio. El martes, desde lejos se escuchan sus martillazos, ya que varias de ellas se ocuparon de fabricar pequeñas cruces de madera y pintarlas de color rosa, en memoria de las asesinadas.
Las acomodaron en la calle frente al Palacio. Eleucalia Matilde Bermúdez colocó un letrero verde frente a una de las cruces. Su hija Pamela, de 16 años, fue asesinada en el Estado de México, el 9 de mayo. Desde entonces, su vida ha dado un vuelco total. Perdió su trabajo en una purificadora de agua, no tiene recursos, y no sabe donde dormir, ya que la policía está investigando el crimen y no le ha entregado la casa desde entonces.
“Soy de origen otomí, nunca he dependido de nadie, a pesar de que soy madre soltera, siempre he sacado adelante a mis hijos, todos los días trabajaba de lunes a sábado, y no quiero que la muerte de mi hija quede impune como tantas niñas”, contó. “Me gustaría que tuviéramos una entrevista con Beatriz Müller, la señora presidenta, creo que ella sería más sensible, como ella es madre. Ella entendería mi dolor y mi tristeza.”
Sandra Soto, de Torreón Coahuila, cuya hermana fue asesinada en 2017, agregó: “Nos unimos con los desaparecidos porque la CEAV debe atender e integrar a todos los ciudadanos que hayan sido objetos de algún delito de violencia. No únicamente desaparecidos, también feminicidios.” Narró que el acceso a los fondos de las CEAV- en el caso de delitos de fuero común como feminicidio son las estatales- está lleno de obstáculos: “Cuando hemos intentado realizar alguna gestión de apoyo, se hacen una serie de trámites en los que tal parece que lo que buscan es fundar legalmente la negativa”, dijo.
Aparte del dolor de haber perdido a un ser querido, la impotencia, y el andar de aquí para allá con el proceso judicial, se desarrollarían muchos daños colaterales, narró. “Hay madres que ahora padecen diabetes a raíz de eso, problemas de audición, migraña, parálisis faciales, infarto del cerebro, o sea una serie de daños que nosotros como familia tenemos que absorber de forma individual, cuando la Comisión tuvo que hacerse cargo desde un principio”, exigió.