Oaxaca.-Con obras de Claude Debussy, George Gershwin y Piotr Illich Tchaikovsky, la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) presenta un concierto virtual desde el Palacio de Bellas Artes con las interpretaciones del Preludio a la siesta de un fauno, Concierto para piano y orquesta, y la Quinta Sinfonía, bajo la batuta del director huésped Eduardo Strausser.
En el marco de la campaña “Contigo en la distancia” de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, el pianista Rachid Bernal, ganador del Concurso Nacional de Piano Angélica Morales, participará como solista en un programa que inicia con el poema sinfónico Preludio a la siesta de un fauno de Debussy, obra estrenada en París en diciembre de 1894.
La obra, inspirada en la oda homónima de Stéphane Mallarmé, es sin duda, una de las piezas más conocidas de su autor; obra crucial en el desarrollo de la estética impresionista. La sensualidad y la potencia visual de la composición motivaron que fuera coreografiada en el año 1912 por Vaslav Nijinsky y presentada en los escenarios de los ballets rusos de Sergei Diaghilev.
Debussy ha sido descrito como un compositor impresionista y especialistas afirman que la música moderna nació con el Preludio a la siesta de un fauno.
Gershwin y la fusión musical
De acuerdo con el programa, será el joven pianista mexicano Rachid Bernal quien interprete el Concierto para piano de George Gershwin.
Para entender mejor a Gershwin y a su música, se debe recordar que fue hijo de inmigrantes rusos de origen judío y, habiendo nacido y crecido en el barrio neoyorquino de Brooklyn, su mundo musical estuvo formado por dos influencias: la expresión sonora de la cultura judía, con sus melodías y armonías características, y el sentimiento rítmico de la población de color de Nueva York.
Estos dos elementos fueron integrados por el compositor a la influencia de la música popular estadounidense de su tiempo (Irving Berlin y Jerome David Kern) para producir el lenguaje musical gershwiniano.
El pianista capitalino Rachid Bernal (1995) ha sido solista en ensambles de música de cámara en diversos estados de la República mexicana, además de participar en clases magistrales con Jorge Federico Osorio, Anatoly Zatin, Józef Olechowski, Enrique Bátiz y Horacio Nuguid, así como ser concertista en la Orquesta Sinfónica Nacional, la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo y la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro.
Sinfonía No. 5
Considerada una de sus obras maestras, la Sinfonía No. 5 en Mi menor, Op. 64 de Piotr Illich Tchaikovsky fue estrenada por el propio compositor en noviembre de 1888 en el Teatro Mariinsky de San Petersburgo.
Los analistas han comparado esta composición con la más famosa de este género, la Sinfonía No. 5 de Beethoven, porque en ambas es perceptible el mismo concepto estético y humano de la victoria a través de la lucha.
Así como la sinfonía de Beethoven nace, crece y permanece, a partir de su fogoso tema inicial, la obra de Tchaikovsky está caracterizada por el tema con que comienza el primer movimiento, expresado por los clarinetes en forma solemne y reflexiva.
El director invitado
El director huésped Eduardo Strausser es considerado "un futuro prometedor para una de las caras nuevas en el mundo de la música". Ha dirigido las orquestas Sinfónica de Berna, la Filarmónica de Luxemburgo, la Sinfónica de Berlín y la Sinfónica de Queensland.
Durante 2016-2017 dirigió las óperas Elektra de Strauss, y Fosca, de Carlos Gomes, así como La flauta mágica y La bohème. Ha trabajado con el Ballet Nacional de São Paulo, así como con la Orquesta de Cámara Kurpfälzisches, la Südwestdeutsche Philharmonie Konstanz, el Festival de Cuerdas de Lucerna y la Camerata de Berlín. Ha estado al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional de México en varias ocasiones.
El concierto dirigido por Eduardo Strausser se transmitirá el viernes 14 de agosto a las 20:00 horas en la plataforma www.contigoenladistancia.cultura.gob.mx