A 70 años de su partida, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), a través de la Coordinación Nacional de Literatura, recuerdan este 25 de diciembre al poeta, ensayista, narrador y dramaturgo, autor de poemarios destacados como Reflejos (1926) y Décima muerte (1941).
El escritor Roberto Acuña afirma que Xavier Villaurrutia pertenece a la generación de los Contemporáneos, quienes lograron sentar las bases de la literatura mexicana a través de una poesía experimental e interiorizada: “(Villaurrutia) es un poeta que habla sobre el viaje interior, sobre la necesidad de viajar sin salir de la habitación”, agregó.
En entrevista concedida a Televisión Educativa, el también académico por la Universidad Nacional Autónoma de México señaló que tanto la poesía de Juan José Tablada como la de Ramón López Velarde influyeron directamente en la obra del autor de Nostalgia de la muerte (1938).
“Si vemos la antología que le hizo Villaurrutia a López Velarde, El león y la virgen (1942), tenemos estos contrarios que no pueden dejar de estar unidos, el deseo y la virginidad coexisten en la poética de López Velarde. Esto es muy importante para el quehacer poético de Villaurrutia, porque él está en la búsqueda de su identidad”, explicó.
Para la investigadora Ana Elena Díaz Alejo, la primera faceta de Xavier Villaurrutia contiene reminiscencias de la poesía modernista, es decir, la preocupación por la luz, el color, la sensorialidad que llegaba hasta los niveles de la sensualidad.
En entrevista transmitida en agosto de 2020, la académica señaló que Villaurrutia fue un poeta que le cantaba al amor, que no tiene sexo ni preocupaciones sociales, políticas ni compromisos.
Xavier Villaurrutia nació el 27 de marzo de 1903 en la Ciudad de México. Publicó más de 22 obras, entre poesía, teatro y ensayo. Formó parte del grupo de los Contemporáneos, integrado por Salvador Novo, Carlos Pellicer, José Gorostiza, Jaime Torres Bodet, Jorge Cuesta y Gilberto Owen, quienes se distinguían por su gusto por la crítica y el surrealismo.
En 1928, el autor de Nocturnos (1933) fundó, junto con Salvador Novo y Antonieta Rivas Mercado, el Teatro Ulises, el cual se distinguió por su oferta escénica vanguardista y experimental.
En 2009, el INBAL adquirió el Fondo Xavier Villaurrutia que reúne manuscritos originales, mecanográficos, libretos, cuadernos de notas, dibujos, fotografías, objetos y una máscara mortuoria del poeta. Falleció el 25 de diciembre de 1950 en la Ciudad de México.