Tras dar la bienvenida, la titular de la SMO, Ana Vásquez Colmenares Guzmán señaló que es de suma importancia promover la protección de las mujeres desde un enfoque de “responsabilidad social compartida” y visualizarla desde los diferentes niveles de prevención: primaria, secundaria y terciaria.

También advirtió, “la prevención es la única manera de detener la violencia”, por lo que se manifestó a favor de fortalecer y articular las capacidades comunitarias para despertar el compromiso de la ciudadanía en la prevención de la violencia contra las mujeres.

Asimismo, describió algunas de las acciones de prevención de la violencia que realiza la dependencia en el ámbito comunitario en conjunto con las 400 Instancias Municipales de las Mujeres (IMM) y los 40 Centros para el Desarrollo de las Mujeres, el trabajo en los Círculos de paz, los Círculos de mujeres y Círculos de varones.

Agregó además actividades con la Red de Promotoras Interculturales de la SMO, la Red de Abogadas Regionales para Seguimiento y Capacitación en Municipios con Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres.

Por su parte, la conferencista argumentó que el tener un concepto erróneo de la seguridad conlleva fallas en la ruta que se siga para erradicar la violencia contra las mujeres, por lo que definió y estableció las diferencias entre seguridad pública, humana y ciudadana.

En este contexto explicó la necesidad de hacer un cambio de paradigma en la seguridad, en la protección de las personas y de sus derechos humanos, de los colectivos como los pueblos originarios y describió la importancia de poner más énfasis en la seguridad urbana y en los procesos comunitarios.

También se pronunció por reorientar el gasto público en materia de seguridad, pues actualmente la industria del miedo es la más beneficiada, “es preciso invertir más no gastar en seguridad”, agregando por qué es fundamental agregar la perspectiva de género para lograr cambios de fondo en las acciones de erradicación de la violencia.