Oaxaca.-Este año conmemoramos 105 años de vigencia de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Una constitución viva y dinámica que a lo largo de su historia ha recogido las exigencias de una sociedad plural y diversa, ávida de justicia, libertad, igualdad, democracia y bienestar.
Nuestra Constitución ha sentado las bases para una convivencia pacífica y ha dado cauce a nuestros anhelos sociales. Su texto actual refleja las luchas históricas que por generaciones hemos librado, algunas aún vigentes, pero que han logrado un sistema político más democrático y más representativo y han dotado a la ciudadanía de medios de defensa más efectivos contra la arbitrariedad.
Muchos fueron los años en que se fueron creando y ajustando instituciones para dotar de certeza y credibilidad a los procesos electorales.
Se modificaron la Constitución y las leyes para crear al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) como la institución que imparte justicia electoral en nuestro país y da certeza a la ciudadanía en la elección de sus representantes y autoridades.
A lo largo de más de 25 años, el Tribunal Electoral, a través de sus sentencias, ha contribuido a lograr que la democracia constitucional mexicana sea mucho más robusta al hacer valer el Estado de derecho como el ámbito para la resolución de las controversias políticas y poner a las personas y sus derechos en el centro de sus decisiones.
Desde su establecimiento, los tribunales electorales han desempeñado un papel decisivo en beneficio de la estabilidad política y la seguridad jurídica del país. Sin embargo, para mantener este reconocimiento se necesita mucho más que el estricto cumplimiento de la ley y la gestión de los asuntos jurisdiccionales.
Recientemente, en la Sala Superior del TEPJF emprendimos esfuerzos para actualizar los procesos y la normatividad interna que, a través del diálogo y la labor conjunta, permitan generar políticas públicas institucionales acordes a nuestros tiempos y, sobre todo, con marcada orientación ciudadana.
El objetivo que nos hemos trazado las magistradas y los magistrados es fortalecer a la institución para modernizar la impartición de justicia electoral en beneficio de la democracia mexicana y, principalmente, de la ciudadanía.
A más de un siglo de distancia tenemos la responsabilidad inaplazable de hacer de la Constitución una realidad vigente en la vida diaria de todas las personas. En el TEPJF estamos comprometidos a seguir trabajando sin descanso hasta lograr la meta de una justicia electoral plena y completa para todas y todos.