Oaxaca.-El médico especialista en patología Ruy Pérez Tamayo, precursor de la divulgación científica y médica en México, falleció este jueves a los 97 años, informaron instancias a las que perteneció, como la Facultad de Medicina de la UNAM o El Colegio Nacional.
“Con enorme tristeza participo la muerte de un hombre excepcional: Ruy Pérez Tamayo. Ruy fue el mejor amigo de mi padre, el hombre que lo cuidó y quiso durante su larga enfermedad. Yo espero que, aunque no creía en Dios, Dios lo cuide y lo mire como uno de sus mejores hombres”, publicó en Twitter la poeta Malva Flores.
“La comunidad científica de nuestro país ha perdido a uno de sus mayores representantes”, apuntó El Colegio Nacional, a donde Tamayo ingresó como miembro en 1980.
Nacido en Tampico, Tamaulipas, en 1924, Ruy Pérez Tamayo estudió medicina en la UNAM, y se especializó en patología. Fundó y dirigió durante 15 años la Unidad de Patología de la Facultad de Medicina de su alma mater en el Hospital General de México, y durante 10 años el Departamento de Patología del Instituto Nacional de Nutrición.
Se desempeñó como profesor de patología en la UNAM durante más de 50 años, además de haber sido profesor visitante en las universidades de Harvard, John Hopkins, Minnesota, Galveston, Yale, Tel Aviv, Madrid y Lisboa, así como en Costa Rica, San Salvador, Panamá, Venezuela, Colombia, Chile y Argentina.
A lo largo de su vida publicó más de 150 artículos científicos en revistas nacionales y extranjeras, así como 39 libros -15 de temas científicos y 24 de ensayos históricos y de divulgación científica-, y fue reconocido con el Premio Nacional de Ciencias en 1974, entre muchos otros galardones, como el Aida Weiss, en 1986, o la Presea José María Luis Mora, en 2002.
Entre sus muchas contribuciones científicas está la descripción del efecto de la metionina en la cicatrización de las heridas. Además, describió por primera vez en México la neumonitis reumática; el reticulosarcoma de partes blandas; la mesotelioma pleural; la amibiasis cutánea; la criptococosis; el enfisema bronquiolar, y el mesotelioma peritoneal.
Asimismo, señaló las características propias de nuestro medio de la aterosclerosis; los tumores del corazón y pericardio; carcinoma primario del hígado; la tuberculosis; la cirrosis intersticial difusa, y el carcinoma bronquioloalveolar. Sin olvidar que contribuyó en el estudio de los mecanismos humorales del hiperesplenismo, la reabsorción de la colágena y el papel de las células.
Perteneció en total a 48 sociedades científicas nacionales y extranjeras, además de ser parte de la Junta de Gobierno de la UNAM entre 1983 y 1993; miembro de la Academia Mexicana de la Lengua -de la que fue director adjunto-, del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República o del Consejo Asesor del Conacyt.
Ante la noticia de su fallecimiento, amigos, colegas y discípulos comparten en redes sociales mensajes de reconocimiento y despedida.
“Ruy Pérez Tamayo (1924-2022) se levantaba antes de las cinco de la mañana para ir al laboratorio. Daba clases. Escribía y leía. Jugó tenis durante años. Formó generaciones de médicos. Escribió un ensayo memorable sobre la ‘serendipia’. Maestro detrás de las ideas. Descanse en paz”, tuiteó el escritor Adolfo Castañón.
“Ha muerto Ruy Pérez Tamayo, mexicano eminente, compañero en @ColegioNal_mx. Con su ojo clínico, curaba el cuerpo; con su empatía, curaba el alma”, publicó, por su parte, el historiador Enrique Krauze.
“Se va una mente brillante. Un científico y humanista a quien admiré y quise. Ruy Pérez Tamayo. Lo lamento mucho. Y abrazo con cariño a su familia y amigos”, expresó la escritora Mónica Lavín.
“Lamentable fallecimiento del Dr. Ruy Pérez Tamayo, Profesor Emérito de @UNAM_MX, @FacMedicinaUNAM, miembro del @ColegioNal_mx, gran maestro, científico, investigador y promotor de la ciencia y la cultura. QEPD”, tuiteó, por su parte, el director de la Facultad de Medicina, Germán Fajardo Dolci.