Oaxaca.-Minutos después del despegue, los dos propulsores del cohete volvieron a aterrizar en la Tierra.
La sección central de la nave no será recuperada.
El supercohete Falcon Heavy había volado por primera vez en una prueba en 2018, cuando transportó el automóvil Tesla del magnate Elon Musk, propietario de ambas compañías.
El cohete se utiliza para lanzar cargas útiles pesadas o a órbitas más distantes.
Es capaz de llevar hasta 64 toneladas a la órbita terrestre. La NASA eligió al Falcon Heavy para poner en órbita alrededor de la Luna ciertos componentes de su futura estación espacial.