*Advierte Defensoría condiciones de riesgo en la Sierra Sur
Oaxaca.-La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) urgió a las autoridades de los tres niveles de gobierno, atender de forma integral, el conflicto entre Santiago Textitlán y su agencia, Santiago Xochiltepec, ante un resurgimiento de la violencia entre ambas localidades.
El organismo autónomo señaló que, tras los hechos del 6 y 7 de octubre, en los que se registraron disparos y la muerte de una persona de nombre Ernesto C.G., se solicitaron medidas cautelares, a través del expediente DDHPO/CA/508/20/2020, por lo que se requirió a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y en colaboración a la Guardia Nacional, que efectúen acciones para garantizar la seguridad en la zona, así como en los caminos que comunican a estos pueblos con la cabecera distrital de Sola de Vega.
De la misma forma, la DDHPO solicitó a los institutos Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) y de Estudios de Bachillerato de Oaxaca (IEBO), retomar los servicios educativos en el nivel básico y medio básico, respectivamente, ya que ante la salida de la plantilla de profesores, se vulneran los derechos de niñas, niños y adolescentes a la educación.
También, requirió a los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) y al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS-Bienestar), restablecer la atención médica para la sociedad en general que habita no solo estas localidades, sino en toda esa región de la Sierra Sur.
La Defensoría sostuvo que la complejidad del conflicto entre Textitlán y Xochiltepec implica un abordaje regional, integral y comunitario, no solo de seguridad, que atienda las distintas problemáticas presentes en la zona, pues el mismo se circunscribe en una serie de pugnas añejas entre diversas comunidades de esa zona.
Por ello, para el organismo autónomo es importante que las autoridades responsables generen un plan de intervención que ayude a reconstruir el tejido social en toda esta región del estado, pues de manera histórica se han presentado desacuerdos de tipo agrario, forestal e incluso minero, que sumados a las deudas históricas en materia social, de desarrollo y de justicia, generan procesos de violencia e inestabilidad social en este lugar.
En este sentido, la DDHPO recordó que el 31 de mayo de 2002, se registró el homicidio de 26 personas originarias de Santiago Xochiltepec, en el paraje conocido como Agua Fría, donde fueron emboscadas mientras regresaban de sus trabajos en el aserradero de San Pedro El Alto.
Así también, en diciembre de 2020, se registró el desplazamiento forzado de pobladores de Río Santiago, agencia de Santiago Textitlán, lo que derivó en la salida masiva de familias de esta localidad hacia la cabecera municipal, conflicto que hasta el momento no se ha resuelto, aún cuando se han realizado diversas mesas de diálogo y negociación con cada una de las partes del conflicto (Río Santiago y Santiago Xochiltepec), y de manera conjunta.
Ante ello, la DDHPO llamó nuevamente al diálogo como eje articulador para dirimir cualquier diferencia, debido a que son las niñas, niños y adolescentes, el sector mayormente afectado ante el desplazamiento forzado, orfandad, violencia, falta de educación y salud.
Es indispensable, afirmó la Defensoría, que se inicien procesos integrales de paz en la zona, que atiendan de fondo no sólo los conflictos agrarios, sino de olvido y marginación que persisten en estas localidades, puesto que solo así, se podrá reconstruir el tejido comunitario y se iniciará el proceso de justicia histórica pendiente desde hace décadas.