La falta de oxigenación en la laguna se debe al taponamiento de la bocabarra que la comunica con el mar.
“Todo eso causa, causa que no haya un intercambio de oxígeno y todo eso se empieza a descomponer dentro de la laguna, lo que provoca que bacterias principalmente, empiecen a crecer de manera muy, muy proliferada, en este caso ha de ser una bacteria que está proliferando y la coloración que está dando a la laguna es esta coloración rosa”, apuntó Yanet Soledad Hernández Aquino, bióloga de la Secretaría del Medio Ambiente de Oaxaca.
Para los habitantes de La Escobilla, la coloración rosa en la laguna La Salina, lejos de ser un atractivo para los visitantes, es un motivo de alarma.
“La laguna nunca se ponía así, era un agua muy limpia, tenía pescado, tenía camarón, aquí era una laguna que nosotros nos manteníamos, de todos los productos que tenía la laguna nosotros lo pescábamos, ahorita quién cree que se va a meter a pescar”, comentó Josefina López, habitante de La Escobilla.
Según las autoridades ambientales, una solución es abrir la bocabarra para que ingrese el agua del mar y con ello la oxigenación de la laguna alcance niveles normales o la otra, esperar hasta la llegada de las primeras lluvias, que provocarían el mismo efecto.
Esto ha provocado la muerte de algunos microorganismos y la aparición de otros, que serían los responsables del color rosa en las aguas de La Salina.