| | Oaxaca de Juárez |
Miércoles 27 de noviembre, 2024.
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Oaxaca.-Este mes notarás que en algunas regiones los bosques se tornan rojizos y las hojas de los árboles comienzan a caerse, el otoño ha llegado, también habrá las últimas lluvias de meteoros del verano, la conjunción de la Luna y Saturno. Al cierre del mes tendremos una espectacular vista del gigante gaseoso Júpiter.
El equinoccio de otoño nos indica la transición del verano al otoño, y como el origen de su nombre lo indica es la fecha en que el día y la noche tienen casi la misma duración, es decir, 12 horas.
Este año, en el hemisferio norte, el equinoccio de otoño ocurre el día 23 de septiembre a la 01:03 horas de Tiempo Universal, esto es, el día 22 de septiembre a las 20:03 horas del centro de México; en tanto, para el hemisferio sur estará iniciando la primavera.
El obelisco hallado en la pequeña isla Philae en el cauce del río Nilo, fue fundamental para que Jean-François Champoillion lograra descifrar la triple inscripción en la Piedra Rosetta y de esta manera se pudieran interpretar las antiguas inscripciones egipcias.
La vital importancia de estos hechos inspiró a los astrofísicos para crear una sonda espacial que pudiera ayudar a estudiar e interpretar el origen de los cometas, asteroides y del sistema solar.
La sonda espacial Rosetta, incluyendo su módulo de aterrizaje Philae, fue concebida en 1993 y lanzada el 2 de marzo del 2004 hacia el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.
El 8 de junio del 2011 entró en modo hibernación perdiendo toda comunicación con la Tierra, despertando el 20 de enero del 2014, iniciando el modo de reactivación y comprobación de instrumentos.
Después de más de 10 años de vuelo, el 6 de agosto, la sonda entra en la órbita del cometa, realizando algunos ajustes, y el 10 de septiembre, inicia la toma de datos para generar la cartografía del cometa.
Para el 12 de noviembre del mismo año, se lleva a cabo la maniobra crucial de la misión, el descenso del módulo Philae a la superficie del cometa; desafortunadamente el aterrizador no fue capaz de anclarse y después de algunos rebotes pierde la comunicación; el 15 de junio del 2015, Philae muestra señal de actividad, aunque no logró recuperarse, y el 15 de noviembre finalmente es desconectado.
La enorme perdida de Philae no impidió que Rosetta continuara con gran éxito su trabajo científico, hasta el 30 de septiembre del 2016, cuando inicia el descenso programado de la nave nodriza, para estrellarse y desconectarse.
Hoy en día los restos de Rosetta y Philae viajan juntos en el cometa, por el oscuro universo.
La lluvia de meteoros α Aurígidas tendrá actividad entre el 28 de agosto y el 05 de septiembre, con su máximo el 01 de septiembre. La tasa máxima observable será de seis meteoros por hora.
El mejor momento será poco antes del amanecer del día 01 de septiembre, en dirección de la constelación de Auriga (el Cochero), hacia la parte noreste de la esfera celeste.
No hay que confundir a la lluvia de meteoros de las Perseidas con esta discreta lluvia de meteoros, que estará activa entre el 05 y el 21 de septiembre, con un máximo el 09 de septiembre. La tasa máxima observable será de cinco meteoros por hora.
El radiante se encuentra en dirección de la constelación de Perseo, hacia la parte noreste de la esfera celeste, siendo el mejor momento para su observación la madrugada del 09 de septiembre.
Hay que recordar que no se necesita ningún instrumento óptico para visualizar estas lluvias, lo único que se requiere es identificar las regiones, mantener atenta la mirada, estar bien abrigado, un café, un lugar con mínima contaminación lumínica y cielos despejados.
La Luna estará compartiendo su Ascensión Recta con el planeta Saturno, esto lo conocemos como una conjunción Luna – Saturno.
En esta ocasión, nuestro satélite natural estará pasando a 3° 56´ al sur del Señor de los Anillos, y ambos podrán ser vistos juntos en dirección de la constelación de Capricornio.
Si desea maravillarse con la espléndida vista de los anillos de Saturno, para lograrlo bastarán unos binoculares o un pequeño telescopio.
En 1846, Johann Gottfried Galle y Heinrich Louis d’Arrest encuentran a Neptuno, con sólo un grado de diferencia del lugar teórico dado por Urbain Jean Joseph Leverrier.
Neptuno es observacionalmente muy atractivo debido al tono azul de su atmósfera que está compuesta mayormente por hidrógeno, helio y metano, siendo este último quien le da ese color.
En septiembre, Neptuno estará en oposición, es decir alineado con la Tierra y ambos del mismo lado del Sol; al mismo tiempo estará en perigeo, es decir, en su mínima separación con la Tierra, ubicándose a una distancia de 28.91 unidades astronómicas.
En el momento de la oposición, el 16 de septiembre a las 17:12 horas del centro de México, alcanzará una magnitud máxima de 7.8, por lo que será visible con binoculares o un pequeño telescopio, en dirección de la constelación de Acuario.
La nebulosa planetaria NGC 7293 (Nebulosa de la Hélice), en la constelación de Acuario, fue descubierta por Karl Ludwing Harding en 1824 y se ubica a unos 680 años luz de la Tierra, haciéndola una de las nebulosas planetarias más cercanas a nosotros, con un radio de 2.87 años luz.
La nebulosa “El Ojo de Dios” estará bien ubicada para su observación la mayor parte de la noche, con una magnitud de 7.6 puede buscarse hacia la parte sureste de la esfera celeste.
Necesitarás de unos binoculares o un pequeño telescopio para localizarla, un cielo despejado y con poca contaminación lumínica. ¡Buena suerte!
El mayor planeta del sistema solar, Júpiter, estará en oposición, es decir, estará alineado con la Tierra y ambos del mismo lado del Sol; al mismo tiempo estará en perigeo, es decir, en su mínima separación con la Tierra; ubicándose a una distancia de 3.95 unidades astronómicas.
En el momento de la oposición, 26 de septiembre a las 14:25 horas del centro de México, alcanzará una magnitud máxima de -2.9, por lo que será visible a simple vista la mayor parte de la noche en dirección de la constelación de Piscis; pero si desea ir un poco más allá y observar las llamadas “lunas galileanas”, va a requerir de unos binoculares o un pequeño telescopio.
Desde las primeras horas del día 26 de septiembre veremos un “acercamiento” entre las lunas Io y Europa, y si es aún más audaz, observando durante toda la noche notará que al amanecer del día 27 otra luna, Ganímedes, va a “acercarse” a la cuarta luna galileana, Europa
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