Oaxaca.-En México, el etiquetado frontal en los productos ultraprocesados ha permitido una reducción de 1.3 millones menos de personas con obesidad.
Además, el etiquetado frontal ha permitido un aumento del 6% en el consumo de agua y una disminución en el consumo de refrescos entre la población mexicana.
Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), el consumo de agua ha aumentado del 52% en 2006 al 58% en 2021, mientras que el consumo de refrescos ha disminuido.
La reformulación de productos ultraprocesados y bebidas azucaradas también ha permitido una reducción del 9% en el uso de edulcorantes que contienen estos productos. Además, el etiquetado frontal ha llevado a la reformulación del 56% de los productos de la industria, en los cuales se disminuyó la cantidad de azúcares.