Por: Jorge Nuñez.

 

Oaxaca.- En esta ocasión, a ya más de medio año desde su presentación, y a escasos meses de la siguiente jugada de César Elí García, escribiré una brevísima reseña sobre “Fuego Punk”, su primer libro de poemas.

 

“Fuego Punk”, este libro es la recapitulación de dos poemas extensos del poeta oaxaqueño César Elí García, es un libro bicéfalo, en donde, como en un tótem antiguo, encontramos la dualidad entre lo urbano y la naturaleza. El primero representado en el asfalto y la segunda simbolizada en la figura mítica del fauno.

 

Este título y “Exvotos”, del chileno Juan Carreño, son la apertura de puertas de la editorial independiente “Cabros Editores”. “Fuego Punk” cuenta con ilustraciones de los artistas, y colaboradores de la editorial, Dionicio Martínez y Nereyda Domínguez.

 

Cómo ya he dicho, “Fuego Punk” es recapitulación y apertura; recapitulación, pues el poema “Punk sin cresta”, es el testimonio que Elí nos relata sobre sus amigos de infancia y juventud, quienes fueron quedando a lo largo del camino debido a sus circunstancias sociales, pero que fueron impulso para que él pudiera estar parado donde está hoy. Es reconocimiento y gratitud hacia ellos, pero también advertencia y despedida, pues “Punk sin cresta” busca reivindicar sus memorias y ser cierre de una etapa de escritura, para abrir una nueva, quizás más madura.

 

Por otra parte, la segunda cabeza es el poema “Fuego en el Fauno”, una lluvia de reflexiones con base en la mitología grecorromana. En las primeras dos partes de este poema, el erotismo y la labranza se unen en un acto fecundador, en la libación libidinosa hacia lo natural, representado en lo divino. Además, encontramos en la tercera parte un canto a la gastronomía y las tradiciones de Oaxaca; un canto y libación para la cultura de la tierra natal de Elí.

 

Estas son las dos cabezas de este libro, por una parte, la urbanidad, con sus contradicciones y su lucha constante de todos contra todos. El ámbito social se manifiesta como invención de la modernidad. Por otra parte, está lo rural apegado a la tradición, y a la ritualidad, y por ende a la naturaleza. Hay que comprender a las serpientes que se aparean y por un rato caminan erguidas, haciéndonos creer que son una sola, dos partes de un todo, la construcción social y el orden cósmico.

 

Para concluir, transcribo a continuación el manifiesto que sirve de preámbulo al libro.

 

"No escribo cosas complejas…

eso es de intelectuales.

 

Rectifico:

No escribo cosas sencillas de manera compleja…

eso es de intelectuales.

 

Escribo cosas complejas de manera sencilla

para dejar sin trabajo a los intelectuales.

 

" Ahora nos toca seguir pendientes sobre su próximo trabajo en la editorial,"Espejismos”, libro del que espero pronto tengamos noticias para compartir