La empresa estableció una serie de acuerdos ambientales, los cuales no ha cumplido, como el tratar sus aguas y sus residuos.

Expresó que la empresa porcina se deshace de las aguas negras en lagunas a cielo abierto, donde además de excrementos, depositan crías muertas que se descomponen y generan focos de infección.

Dijo que esas lagunas artificiales están a menos de 200 metros del Río Grande, que atraviesa el municipio de San Miguel Tequixtepec, y es usado para riego, como abrevadero para animales de pastoreo, e incluso como agua de uso común en las viviendas.

Denunció además que la empresa extrae del subsuelo volúmenes desconocidos de agua, pues el nivel de los pozos de la comunidad ha disminuido.

Por lo anterior pidió a las y lo diputados de Oaxaca solicitar a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), a que retire de inmediato la concesión para el uso del agua a la granja Tehuacán, porque se otorgó sin consulta previa, libre, informada y de buena fe a la comunidad indígena propietaria de las tierras comunales en donde se asienta.

Pidió a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) investigue los daños ambientales por la operación de esa granja, además de que ordene la reparación del daño ambiental y presente denuncia ante el Ministerio Público de la Federación por la posible comisión de los delitos contra el ambiente.