Oaxaca.--En el colmo de la irresponsabilidad, equipo de diputada Liz Arroyo escribió mal los apellidos de la magistrada que ganó el amparo al ponerle “Irieta Jimpenez” y con eso se fregó

Las vencidas que se juegan al interior del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca (TSJO) entre el mismo gobernador Salomón Jara Cruz y el grupo de Alfredo Lagunas Rivera por tener el control del Poder Judicial podría afectar al mismo jefe del Ejecutivo sino logra colocar a sus magistradas con quienes pueda caminar en los asuntos que tienen que ver con el tema de justicia e ir construyendo el camino.

A estas alturas ya no se puede permitir errores como el cometido por la diputada Liz Arroyo, presidenta de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia en la 65 Legislatura local, al no haber cumplido en tiempo y forma con el procedimiento y escribir mal los apellidos de la magistrada que se fue al amparo y lo ganó, Sonia Luz Ireta Jiménez afín al grupo Lagunas.

Han estado tan ensimismados en la elección del nuevo fiscal general, el cual ya prácticamente está designado y sería Bernardo Rodríguez Alamilla que no han puesto la atención debida en el TSJO, sí, porque es ahí donde se decide si se aplica la justicia o no, la Fiscalía consigna, pero el juez es quien libera las órdenes de aprehensión y emite sentencia.

Por tanto, el equilibrio de poderes al interior del propio Tribunal es fundamental para cumplir con esa tarea encomiable como es la impartición de justicia.

Miren ustedes.

El pasado 6 de enero dos magistrados integrantes del Tribunal Superior de Justicia del Estado concluyeron el periodo por el que fueron designados. Se trata de: Manuel López López (renunció a su derecho de ser evaluado) y Sonia Luz Ireta Jiménez (promovió Juicio de Amparo 42/2023)

Mismo que le fue concedida la suspensión definitiva solicitada para el efecto de que las cosas se mantengan en el estado que se encuentran, y, en consecuencia, continúe con el cargo de magistrada del TSJO hasta por 9 años más.

Eso pretende, pero la Consejería Jurídica del Gobierno del Estado señala que no es una determinación definitiva, eso será mientras dura el procedimiento del juicio que apenas se va a debatir en la audiencia constitucional y tienen la seguridad de que la magistrada se va.

Por tanto, el proceso para elegir a las magistradas continúa y en la demanda de amparo promovida por la magistrada en mención puso ahí a otros 11 magistrados que están en su misma situación y que a ellos no se los han quitado, lo que hizo con eso es darles señales a los de enfrente de que fueron ratificados tácitamente y eso jurídicamente no es viable.

Vale decir que el craso error de lo que ocurrió con dicha magistrada fue así por la omisión de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso del Estado que no inició en tiempo el periodo de evaluación de estos magistrados y que cometieron errores de descuido al escribir mal los apellidos de la magistrada en cuestión.

¡El colmo!

Le puso “Sonia Luz Irieta Jimpenez”, y es Sonia Luz Ireta Jiménez, aquí les compartimos el documento para que juzguen ustedes.

¡Que regresen a Liz Arroyo a la primaria!