• Se recibieron 186 mil 900 dosis para proteger a la población vulnerable contra esta enfermedad que afecta las vías respiratorias

Oaxaca .- Los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) informaron que arribó a la entidad un tercer lote de vacunas contra la influenza estacional, con 186 mil 900 dosis, con el fin de proteger a la población vulnerable contra esta enfermedad.

Con esta remesa suman un total de 355 mil 560 inmunológicos que recibió la dependencia, de una cobertura de 563 mil 338. Desde el arranque de la campaña de vacunación por la temporada invernal 2023-2024, se han aplicado 19 mil 120 inmunológicos en toda la entidad.

Ante los cambios de clima en la entidad, la institución señaló la importancia de que las personas vulnerables se apliquen el biológico, ya que protege contra cuatro virus diferentes de influenza AH1N1, AH3N2, influenza B y un segundo linaje del tipo B.

Por tal motivo, la dependencia invitó a las madres y padres de familia para que lleven a sus hijas e hijos de seis a 59 meses de edad a vacunarse. También debe hacerlo el personal de salud y las personas mayores de 60 años, embarazadas, o quienes tengan alguna enfermedad como diabetes, hipertensión arterial y VIH/Sida.

Durante la semana epidemiológica número 42, en Oaxaca se han registrado dos casos de influenza AH1N1, los cuales se presentaron en el municipio de San Juan Bautista Tuxtepec y Huajuapan de León.

La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa, se transmite con facilidad de una persona a otra a través de gotitas expulsadas por la tos, estornudos y al hablar, la cual afecta principalmente a la nariz, garganta, bronquios y pulmones.

Los síntomas son fiebre con escalofríos, tos, dolor de garganta, mucosidad nasal o nariz tapada, dolores musculares y corporales, dolores de cabeza o fatiga. Algunas personas pueden presentar vómito y diarrea, aunque es más común en niñas y niños que personas adultas. 

Ante esta situación, la institución, hace el llamado a la población para que refuercen el lavado de manos con agua y jabón de manera frecuente, no tener contacto directo con personas enfermas, evitar tocarse la nariz, la boca, los ojos, y en caso de síntomas de enfermedad respiratoria, usar cubrebocas.

Además de practicar buenos hábitos de salud como limpiar y desinfectar las superficies de contacto más comunes en el hogar, en el trabajo o en la escuela, especialmente cuando alguna persona está enferma. Dormir ocho horas, mantenerse activo físicamente, controlar el estrés, beber líquidos y comer alimentos nutritivos