Oaxaca.+El XI Encuentro de Defensoras y Defensores Comunitarios comenzó con la llegada de las y los participantes a San Mateo del Mar desde sus distintas localidades, entre abrazos, intercambio de recuerdos y cálido recibimiento de la organización comunitaria Monapaküy, compartimos los alimentos y nos dispusimos a realizar el ritual de apertura del evento, que tuvo como tema central “La espiritualidad”.
Al centro se dispuso la ofrenda, los elementos tradicionales como las velas, el copal, el agua, flores, ruda, albahaca, maíz, se acompañaron con productos de las distintas regiones como: totopo, limones, dulces preparados en casa, aceite de coco, miel, canela y medicina tradicional. Las servilletas de telar de cintura elaboradas por mujeres de San Mateo del Mar sostuvieron toda la ofrenda y se encendió la llama del encuentro.
En esta ocasión, la espiritualidad fue un eje para guiar la conversación. Se compartió sobre el territorio espiritual, a partir de la reflexión sobre la importancia de nombrar y conocer nuestros lugares sagrados y simbólicos. También sobre la lengua, como vínculo con la espiritualidad. Por otro lado, otro eje importante que orientó el encuentro fue la Justicia Climática, un tema urgente que no puede esperar, debido a que son las personas más vulnerables quienes padecen las consecuencias de la crisis climática.
En primer lugar, como se ha hecho en otros encuentros, recorrimos el territorio que nos recibió. Hicimos un ritual a primeras horas del día en el Mar Vivo y cerramos con un ritual en el Mar Muerto. Nos recibieron en sus casas las compañeras de Monapaküy para alimentarnos y descansar, visitamos el Refugio, que a su vez es un Taller de Artes y Oficios, como también el nuevo espacio de talleres y convivencia. Mientras caminamos, también convivimos y aprendimos de San Mateo del Mar, de su lengua, de las distintas luchas de la comunidad y de las mujeres de Monapaküy.
Las actividades del evento tuvieron lugar en el Centro de Educación Preescolar Vicente Guerrero, que fue admirado por quienes asistieron, por la calidez y belleza del espacio. En medio de murales que representan la vida ikoots y palabras en lengua ombeayiüts, se presentó el libro Tiül miiüt, tiül mindek mixejchiiüts (En la tierra y en las lagunas de nuestros antepasados), Atlas del territorio Ikoots de San Mateo del Mar, del antropólogo Cristiano Tallè. En la presentación del libro participaron Beatriz Gutiérrez Luis, integrante de Monapaküy, Abigail Aguilar Vázquez, maestra del Instituto Superior Intercultural Ayuuk, ISIA y la Misionera María de la Luz González.
María de la Luz contó que ha aprendido a vivir en San Mateo del Mar: “La tierra no es nuestra, todos nosotros somos de la tierra, es nuestra sagrada madre, ella lo sabe todo, escucha todo. Del sagrado mar sale nuestra vida, lo que comemos. Se siente uno muy bien cuando habla con la tierra sagrada, con los sagrados mares, con el sagrado viento y el sagrado viento del sur. Sabemos con seguridad cuánto nos ayuda […] El alma ikoots dialoga con la divinidad llamada Teat Montiok, dialogan danzando al ritmo de los tambores y de la flauta, se abrazan con la divinidad en sus mitos y sus leyendas. El objetivo es la petición, gratitud o liberación.”
La compañera Beatriz, afirmó que un defensor que no tiene la parte espiritual que le motive a defender su territorio, está cojo. Le hace falta una parte. Recuerda como en San Mateo del Mar lucharon por defender la Barra Santa Teresa de las empresas eólicas, el pueblo ikoots luchó con la fuerza de su relación espiritual con el mar.
Abigail, mencionó que el libro es la recopilación de la memoria colectiva de los ancestros, lo que nos permite adentrarnos en la vida y cultura de San Mateo del Mar. La compañera ayuujk mencionó que ella vive en su lengua; sueña, piensa, canta y se expresa en su lengua. Ese es el primer paso de la educación, la enseñanza de la lengua materna, en un segundo paso comienza la educación formal que, lamentablemente, no busca promover la enseñanza de la lengua y recuerda como en la escuela el atlas mundial excluía la diversidad lingüista y territorial en México y el mundo.
Con el mensaje de lucha por los espacios sagrados de nuestras comunidades, de la importancia de la lengua para recordarlos, reflexionamos colectivamente la relación entre espiritualidad y territorio.
En la conversación, se afirmó que la espiritualidad es un elemento que rodea la flor comunal, es un vínculo que hay que construir, se necesita conectar con el territorio, así la persona no haya nacido ahí. Da luces para saber cómo hacerle y por dónde ir en la defensa de los derechos. Es una clave heredada por los mayores. Tampoco podemos separarnos de la naturaleza, hacemos parte de ella y, aunque no sea fácil de explicar, la espiritualidad también se alimenta.
En el segundo panel: “Espiritualidad, cultura y lengua”, participaron Leonor Díaz Santos, Ángela Castro Velásquez, Giselle Contreras Laces y Gisela Baloes Gutiérrez. En la conversación, se recordó el ritual que se realiza para que haya abundantes cosechas, para que llueva, para iniciar o concluir los distintos procesos vitales, para pedir permiso a la tierra. En las comunidades existen proyectos, como “Sanando en comunidad” del ISIA, que impulsan el bienestar colectivo de forma física, espiritual y emocional. La ritualidad, que también se expresa en el goce de la fiesta, en el festejo del encuentro y en los abrazos, son el centro de esta conversación. En esta charla se entretejen muchas lenguas, de los distintos lugares de los que provenimos. La palabra en nuestras lenguas lo articula todo, los saberes de medicina tradicional, de las plantas, los nombres de nuestros ríos, de los seres espirituales.
Finalmente, además de los espacios de reflexión, también tuvimos espacios de compartencia. Se proyectó el documental “La fiesta. Comunidades oaxaqueñas que luchan desde lo local contra el cambio climático”, que se ha realizado colectivamente a partir de los encuentros de la REDECOM y en donde se pueden ver alternativas comunitarias que son expresiones de igualdad, en un contexto de crisis climática. También se compartió una noche cultural, con bailes de las regiones: la Danza de la Tortuga del Arenal de San Mateo del Mar, la Danza de los Diablos de la Costa, y Jarabe Mixe por parte del grupo del ISIA, además de poesía y cantos.
Dijo Teat Monteok en boca de nuestros antepasados:
Si quieren ver peces y camarones les pido que cuiden el mar.
No irrespeten el mar, pidan permiso.
Y dijo Teat Monteok:
Si pelean entre ustedes, si tienen envidia,
si actúan por ambición en el mar,
entonces en sus lagunas ya no verán más camarones.
Y estos, se irán al mar vivo.
(Salmo a Teat Monteok. De los pescadores de San Mateo del Mar)
1 de diciembre de 2023, Oaxaca, México.
Red de Defensoras y Defensores Comunitarios de los Pueblos de Oaxaca, REDECOM.
Servicios para una Educación Alternativa, EDUCA, A.C.
Organización Comunitaria Monapaküy.