- Como parte de su agenda nacional, el Instituto llevó a cabo el seminario Creación Literaria en Lenguas Indígenas
- El público podrá disfrutar del recital de canto náhuatl Tlalticpac (Sobre la tierra) en el Museo Nacional de Arte el 24 de febrero
Oaxaca.-La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), como parte de su eje transversal de diversidad cultural, acción constante para impulsar la literatura y su difusión de las lenguas maternas, llevaron a cabo el pasado viernes 17 de febrero el seminario Creación Literaria en Lenguas Indígenas.
En el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia, el Inbal convocó a representantes de las partes creadoras, así como promotoras de la multiculturalidad y el multilingüismo, con la visión de reconocer mecanismos viables para sostener y revitalizar las lenguas indígenas desde la literatura, dinamizando su transmisión y conservación a través de programas y acciones que franqueen la brecha lingüística y cultural que enfrentan en el contexto cultural de nuestro país.
En este foro participaron de manera presencial los escritores y hablantes de una lengua materna: Mardonio Carballo, Margarita León, Karlos Atl, y en formato virtual Zara Monrroy, Nadia López García y Yásnaya Aguilar.
A través de la Coordinación Nacional de Literatura, el Inbal invitó a reflexionar sobre la creación literaria como acto de resistencia, la difusión, la preservación de la tradición oral frente a la escrita, así como las aportaciones de estas lenguas a la literatura mexicana.
En este sentido, el maestro Mardonio Carballo pidió no romantizar las lenguas indígenas y en cambio consideró importante saber que la poética de las lenguas indígenas es una lucha social, mientras Margarita León expuso que “la literatura en lenguas indígenas son actos políticos, y confió que esa exotización que ha caracterizado a las literaturas indígenas ha permitido la recuperación de espacios.
En tanto el escritor Karlos Atl mencionó que “la generación de literatura en lenguas indígenas no únicamente está en el formato impreso o archivo, porque hay otro tipo de archivos que están vivos y que somos las personas (bibliotecas humanas) que en realidad tienen el sostén de lo que significa todo”.
Por su parte, la maestra Zara Monroy aseguró: “Cada palabra que comparto en mi lengua es poesía, pues hay palabras con profundidad que en el español es difícil de entender; nosotros trabajamos en ello, lo compartimos con las personas de afuera o, como en estos sitios, en donde se hacen portavoces de estas comunidades originarias.”
Nadia López dijo: “Más que escritora me asumo como tallerista, para mí la literatura en sí no es un punto de llegada. Hablar de literatura escrita publicada para mí no es un punto en el que algo se haya concluido; todo lo contrario, tener la palabra en un soporte escrito, como puede ser un libro, ahí empieza el trabajo”.
A su vez, Yásnaya Aguilar reflexionó acerca de “cómo defender esos espacios que se están perdiendo a una velocidad muy grande”, por lo cual comentó que habría que considerar la función poética que se ejerce en las lenguas y la literatura como un fenómeno poético determinado cultural e históricamente”.
Los promotores y defensores de una literatura en lengua originaria consideraron importante apelar por la vitalidad de los pueblos, más allá de que las discusiones en torno a ello se hagan cerca del día de la lengua materna.
Coincidieron que la literatura en lenguas originarias ha experimentado un renacimiento y una mayor visibilidad. Muchos autores y autoras indígenas han emergido y están escribiendo en sus lenguas maternas, abordando una amplia gama de temas que reflejan las realidades, las experiencias y las preocupaciones de sus comunidades. Estas escritoras y escritores no solo preservan y enriquecen sus propias tradiciones literarias, sino que también contribuyen a la diversidad y la riqueza cultural de la literatura mexicana en su conjunto.
Señalaron que organizaciones, instituciones y editoriales han comenzado a apoyar y promover la literatura en lenguas originarias, facilitando la publicación y difusión de obras escritas por autores indígenas. Además, se han llevado a cabo esfuerzos para preservar y revitalizar las lenguas indígenas a través de programas educativos y actividades culturales.
En resumen, la literatura en lenguas originarias de México es un aspecto vital de la identidad cultural del país, que refleja la diversidad lingüística y la riqueza de las tradiciones indígenas. Es una parte integral del panorama literario mexicano que continúa evolucionando y floreciendo en el siglo XXI.
Beats Originarios. Poesía, música y rap en lenguas indígenas
Por otra parte, la Coordinación Nacional de Literatura conmemorará el Día Internacional de la Lengua Materna a través de un conversatorio, en el cual confluyen la poesía y la música. Éste se llevará a cabo el viernes 23 de febrero a las 19:00 horas en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.
La actividad multidisciplinaria formará parte del ciclo Las diversas raíces y llevará el título de Beats Originarios. Poesía, música y rap en lenguas indígenas en el cual participarán Julio Vallejo (lengua zapoteca), quien es cantautor, y Juan Sant (lengua totonaca), quien es cantante de rap, ambos contarán cómo viven, a través de su expresión literaria y musical, su lengua materna.
Julio Vallejo es un cantautor binnizá de Juchitán de Zaragoza, Oaxaca. Juan Sant es artista de rap, poeta y escritor en lengua totonaca y español.
Recital de canto náhuatl Tlalticpac (Sobre la tierra)
En tanto, la Coordinación Nacional de Música y Ópera presentará el recital de canto náhuatl Tlalticpac (Sobre la tierra), en el marco del Día Internacional de la Lengua Materna.
El concierto tendrá lugar el sábado 24 de febrero, a las 11:30 horas en el Salón de Recepciones del Museo Nacional de Arte (Munal) y será de entrada libre, pero con cupo limitado.
En este concierto se podrá apreciar la riqueza del náhuatl en la música vocal; el programa estará conformado por Tlalticpac (Sobre la tierra), In tlaneci (La mañana) y Nonantzin (Madre mía), de Jorge Dájer (1926-2012), compositor originario de Durango, quien se dedicó también a la investigación arqueomusicológica, proseguidas por To ilhuicac tlahtzin (Nuestro Padre celestial), Ihcuac tlaneci (Cuando amanece) y To huey tlahtzin Cuauhtémoc (Nuestro gran padre Cuauhtémoc), de Salvador Moreno (1916-1999), compositor, historiador del arte y pintor veracruzano. También escucharemos el Ciclo de canciones Nahuaxochmilli (Jardín nahoa), conformado por In teocuitlatótotl (La calandria), In huitzitzilli (El colibrí) y Calixtli (Pórtico), de Emmanuel Arias y Luna (1936), compositor, director de orquesta y violinista mexicano.
Posteriormente sonará Ma nel xochitl, ma nel cuicatl (Al menos flores, al menos cantos), de Mario Kuri Aldana (1931-2013), compositor y etnomusicólogo mexicano, quien la escribió en coautoría con su hermano Armando Kuri Aldana (1933-2015) y, para cerrar, Xino huaxcati (Se mía), de Armando Montiel (1916-1984) pianista, compositor, director de orquesta y pedagogo mexicano, y Te quiero a las diez, de Efraín Esperilla, reconocido compositor contemporáneo.
En términos de las lenguas originarias que conforman nuestra identidad lingüística en México: en el territorio existen actualmente 364 variantes, habladas por 68 grupos indígenas.
Esta conmemoración se realiza a nivel mundial desde el año 2000, después de que se aprobara la iniciativa en la Conferencia General de la Unesco de noviembre de 1999. La urgencia de esta noción se basa en la preocupación por la pérdida de diversidad lingüística, ya que se estima que al menos 43% de las 6,000 lenguas habladas en el mundo se encuentran en peligro de extinción, lo que conlleva la desaparición de un valioso patrimonio cultural e intelectual.