Oaxaca.-La Secretaría de Salud de Oaxaca ha implementado un cerco sanitario tras detectar más de 100 casos de malaria en un grupo de migrantes en tránsito que provienen de Venezuela, Colombia y Nicaragua.

 

Efren Emmanuel Jarquín, el titular de la dependencia, informó que se ha intensificado la estrategia de control mediante el despliegue de 200 brigadas sanitarias, cuyo objetivo es atender e identificar todos los casos potenciales de la enfermedad.

 

Al finalizar la semana epidemiológica número 43, el estado de Oaxaca ha registrado un total de 116 casos de malaria, una enfermedad provocada por el parásito Plasmodium.

 

Este parásito se transmite principalmente a través de la picadura de mosquitos infectados del género Anopheles.

 

De los casos reportados, 108 son considerados importados, seis son foráneos y dos son autóctonos, lo que indica una prevalencia significativa de la enfermedad en personas que han viajado desde otras regiones.

 

En cuanto a la distribución geográfica de los casos, la Jurisdicción Sanitaria del Istmo es la más afectada, con 89 notificaciones. Le siguen Valles Centrales con 14 casos, la Costa con 10 y la Mixteca con tres.

 

Es importante destacar que las regiones de Tuxtepec y Sierra no han reportado ningún caso hasta la fecha, lo que sugiere una variabilidad en la incidencia de la enfermedad en diferentes áreas del estado.

 

Analizado la procedencia de los pacientes, se observa que 97 de los casos corresponden a migrantes provenientes de Venezuela, mientras que otros nueve son de Colombia y cinco de Ecuador.

 

Además, se han registrado dos casos de México y uno de Nicaragua, Perú y República Dominicana, respectivamente.

 

En términos de género, la mayoría de los afectados son hombres, con un total de 87, frente a 29 mujeres, lo que podría reflejar patrones de migración y exposición a factores de riesgo en diferentes poblaciones.

 

Los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) han implementado diversas estrategias para abordar esta situación.

Entre ellas se incluyen:

Vigilancia epidemiológica: Se están realizando pruebas de diagnóstico en pacientes febrilmente sospechosos, especialmente entre la población migrante.

 

Educación sobre prevención: Se promueve el uso de mosquiteros, repelentes y ropa protectora para reducir el riesgo de picaduras por mosquitos infectados.

 

Control de hábitats: Se llevan a cabo acciones para eliminar criaderos de mosquitos en comunidades locales, lo que incluye la remoción de vegetación y el tratamiento de aguas estancadas12.

 

A pesar de los esfuerzos, los SSO han registrado 44 casos acumulados de malaria en total hasta la fecha, con una gran parte de estos casos siendo importados por migrantes.

 

Las autoridades han subrayado la importancia de buscar atención médica inmediata ante cualquier síntoma relacionado con la enfermedad, como fiebre y escalofríos.