Oaxaca.-Un panel de solución de diferencias concluyó que las restricciones impuestas por México, que prohíben el uso de maíz genéticamente modificado en tortillas y otros alimentos, carecen de sustento científico y violan los compromisos comerciales acordados.

 

La decisión respalda siete reclamaciones de EE. UU., que argumenta que estas medidas afectan negativamente su acceso al mercado mexicano. Aunque México no está de acuerdo con el fallo, deberá adaptarse a las conclusiones del panel para evitar sanciones comerciales.

 

La decisión del panel sobre el maíz transgénico impactará negativamente a los productores de maíz en México. Al eliminar las restricciones, se incrementarán las importaciones de maíz estadounidense, lo que podría provocar una caída en los precios locales y debilitar la producción nacional.

 

Esto podría llevar a una mayor dependencia del maíz importado, afectando la seguridad alimentaria y la autosuficiencia agrícola del país.

 

Además, los productores mexicanos enfrentarán competencia desleal frente a precios más bajos, lo que podría resultar en pérdidas económicas significativas para los agricultores locales.