- La reciente decapitación del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, ha revelado conexiones alarmantes entre autoridades locales y grupos criminales.
Oaxaca.-Según fuentes del Gobierno federal, Arcos se reunió con miembros del grupo delictivo conocido como Los Ardillos antes de su asesinato, aunque no se ha especificado la fecha exacta de este encuentro13.
El asesinato de Arcos, ocurrido el 6 de octubre de 2024, ha desatado una ola de indignación en México. Apenas unos días antes, el alcalde había expresado su preocupación por la seguridad en la región y había solicitado apoyo al Gobierno estatal para garantizar la gobernabilidad.
Su mano derecha, Francisco Gonzalo Tapia, había sido asesinado solo tres días antes, lo que incrementó las tensiones en un contexto donde la violencia del narcotráfico se ha intensificado.
La brutalidad del crimen es notable; su cabeza fue encontrada colocada sobre una camioneta blanca, mientras que el cuerpo estaba cubierto con una sábana dentro del vehículo.
Este acto de violencia extrema subraya la creciente impunidad y el control que los grupos criminales ejercen sobre las autoridades locales en Guerrero.
La gobernadora Evelyn Salgado condenó el asesinato y prometió llevar a los responsables ante la justicia, mientras que se han incrementado los operativos de vigilancia en la capital.