- El obispo Salvador Rangel Mendoza, líder religioso de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, en el estado de Guerrero, México, ha generado un gran interés y controversia en la sociedad mexicana debido a un supuesto secuestro exprés que sufrió el fin de semana pasado.
Oaxaca.-El incidente comenzó cuando el obispo desapareció el sábado 27 de abril por la noche después de salir de su casa y visitar una tienda de conveniencia.
No se supo de él hasta el lunes, cuando se confirmó que estaba internado en un hospital público en Cuernavaca, Morelos.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Morelos inicialmente confirmó que el obispo había sufrido un secuestro exprés, en el que le habían robado su camioneta y extraído dinero de sus cuentas.
Sin embargo, posteriormente, el Comisionado de Seguridad Pública de Morelos, José Antonio Ortiz Guarneros, negó que el obispo hubiera sido víctima de un secuestro exprés. Según Ortiz Guarneros, las evidencias recopiladas indican que el obispo entró voluntariamente en un motel con una persona del mismo sexo y que esa persona se retiró posteriormente.
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) ha emitido un comunicado pidiendo que se eviten conjeturas y especulaciones sobre el caso, y que se deje que las autoridades investiguen y determinen las circunstancias exactas del incidente.
El obispo Rangel Mendoza ha sido objeto de críticas y especulaciones en los medios de comunicación y en la sociedad mexicana, lo que ha generado un gran debate sobre la naturaleza del incidente y la responsabilidad de las autoridades involucradas.
