- En Oaxaca, ha surgido un fuerte clamor por la eliminación de la verificación vehicular, impulsado por preocupaciones sobre corrupción y la percepción de que este programa es un mecanismo para extraer recursos del pueblo.
Oaxaca.-La verificación vehicular ha sido implementada recientemente por la Secretaría de Movilidad del Gobierno del Estado, y ha generado una respuesta negativa en varios sectores de la sociedad civil.
Muchos ciudadanos consideran que esta medida es una "nueva estafa" que solo busca aumentar la carga fiscal sobre ellos, argumentando que el gobierno debería enfocarse en una mejor administración de los recursos públicos en lugar de crear nuevos impuestos.
Tanto ciudadanos como representantes políticos, como Margarita García y miembros del Partido del Trabajo (PT), han expresado que la implementación de la verificación vehicular está marcada por corrupción y favoritismo.
Se argumenta que el programa no beneficia al medio ambiente ni a la población, sino que sirve a intereses particulares.
Los opositores a esta medida señalan que muchos ciudadanos ya enfrentan dificultades económicas y que agregar costos adicionales relacionados con la verificación vehicular solo agrava su situación.
Se enfatiza que los recursos generados por impuestos deben ser utilizados para mejorar los servicios públicos y no para enriquecer a funcionarios.
Los manifestantes piden no solo la eliminación de la verificación vehicular, sino también la abolición de otros impuestos como la tenencia vehicular, argumentando que estas son prácticas que benefician a unos pocos a expensas del pueblo.
