Oaxaca.-La contienda se centra principalmente entre la actual vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump, y ambos candidatos están adaptando sus estrategias para atraer a estos votantes.
El voto femenino ha demostrado ser un factor determinante en elecciones anteriores. En 2020, las mujeres representaron aproximadamente el 54.7% del electorado, y su preferencia ha favorecido consistentemente a los candidatos demócratas.
En las encuestas recientes, Harris tiene una ventaja significativa entre las mujeres, capturando alrededor del 56% de su apoyo frente al 40% de Trump
Este aumento en la participación femenina se ha visto impulsado por cuestiones como el acceso al aborto, especialmente después de la decisión de la Corte Suprema que limitó este derecho en 2022
Además, las mujeres jóvenes están más involucradas que nunca, lo que podría traducirse en una mayor movilización electoral. La estrategia de Harris incluye un enfoque en políticas inclusivas que abordan temas como la salud, la justicia social y el cambio climático, lo que resuena particularmente con las votantes
Por otro lado, el electorado latino también es crucial. Este grupo representa aproximadamente el 19% de la población estadounidense y ha sido responsable del 10.5% de los votos emitidos en las elecciones pasadas.
Su apoyo es vital en estados clave como Arizona, Georgia y Nevada, donde las encuestas muestran que Harris ha logrado captar solo un 57% del voto latino, una cifra inferior al 65% que obtuvo Biden en 2020.
Los latinos enfrentan desafíos económicos significativos y están motivados por propuestas que aborden sus necesidades laborales y sociales. A pesar de esto, existe cierto escepticismo hacia la administración actual debido a promesas incumplidas relacionadas con la reforma migratoria.
La campaña de Trump ha buscado atraer a votantes latinos mediante un enfoque fuerte en temas económicos y de seguridad, lo que ha resonado incluso entre algunos migrantes.
