En 50% avance recostrucción de la carretera a Juquila:CAO

El director de Operación Regional de CAO, Pascual Luz Orea, señaló que como resultado de estas obras tan solo para el retiro de escombros, entre tierra, árboles secos y piedras caídas fue necesario utilizar mil viajes de camiones de volteo de siete metros cúbicos cada uno.

Señaló que el volumen de estos materiales equivale a llenar un campo de fútbol de cien por ochenta metros, con una altura de ocho metros de profundidad, ante las dificultades que representan estos terrenos, por su inestabilidad, pues incluso se registran fallas geológicas denominadas "licoidales", donde un 60 por ciento de los predios están integrados por material rocoso y el resto por tierra húmeda, proclive a deslaves y derrumbes. Precisó que las intensas lluvias provocadas por los huracanes Ingrid y Manuel, propiciaron derrumbes en 25 puntos, solo de esta vía, en el que concurren un promedio de dos mil autos diarios y donde fue necesario abrir pasos provisionales en la llamada etapa de emergencia durante los primeros tres días para liberar a mil peregrinos que se encontraban varados en Juquila el Septiembre pasado.

Recordó que el meteoro provocó el desbordamiento del río del municipio de Juchatengo, lo que se llevó parte del camino y hasta una planta de asfalto misma que ya fue repuesta. Para apoyar a los peregrinos que durante este mes ascienden hasta un millón de los 2.5 millones que acuden todo año al santuario de Santa Catarina Juquila, se invirtió hasta ocho millones de pesos  y están por recibirse 20 millones de pesos adicionales para continuar la reconstrucción de los tramos parciales restantes.

El Residente de CAO en Puerto Escondido, Manuel Barbosa, detalló que las obras de reconstrucción contemplan una nueva base hidráulica con materiales pétreos con los cuales se estabiliza el terreno y se construyen nuevamente la carpeta asfáltica.

Previamente en el kilómetro 140 del tramo Sola de Vega al Vidrio, el funcionario destacó la labor de los trabajadores camineros de CAO, pues los deslaves propiciaron la caída de una roca de ochenta toneladas aproximadamente que obstruyó ambos sentidos de la carretera, "De manera que para extraerla fue necesario dinamitarla sin dañar a los vecinos".

Una de las afectadas por el derrumbe de esta enorme piedra, María Ortíz propietaria de un comedor a orilla de esta vía, desde hace siete años, agradeció el apoyo de CAO para hacer transitable este tramo, "Porque sentíamos, que nos iba a caer encima y cuando nos dijeron que iban a dinamitar pensamos que explotaríamos todos, pero fue sorprendente que todo salió bien, no dañaron mi casa ni mi negocio, y los peregrinos vinieron como cada año".